Cuando empezamos a organizar los Desayunos LalaBlu el principal objetivo era suplir la falta de tiempo. Ese tiempo que vuela deprisa en este mundo que, a veces, gira tan rápido. Así que la falta de tiempo y las ganas de conocer a gente que nos escribía tratando de vernos durante el tiempo del que no disponíamos, hizo que decidiera, casi sin darme cuenta el prototipo de los Desayunos LalaBlu. El planteamiento era sencillo: mi casa, una mañana de sábado dos o tres personas como invitados, cafetera a pleno rendimiento, unas flores y un bizcocho recién hecho.
Una temporada más tarde de aquella primera tanda, salimos de mi casa, para encontrarnos en diferentes puntos de Madrid, dándoles un toque quizá menos personal pero sí algo más «pro», así que nos fuimos a desayunar al Salón de Té Vailima, Mür Café y Pipa & Co, siempre manteniendo muy viva esa ilusión propia del que ofrece algo en señal de agradecimiento o del que se dispone a desvirtualizar a compañeros de batallas.
Fuisteis muchos los que nos escribíais interesándoos por estos encuentros, pero nosotras aún extrañadas por toda la curiosidad que producían aquellos famosos desayunos y brunch, continuamos durante un tiempo manteniendo el misterio, el secreto… hasta que un día nos planteamos la apertura definitiva: Y así nacieron los desayunos abiertos, nuestros #desayunoslalablu reconvertidos para poder conocer aún a más gente, poder compartir historias, vivencias, preocupaciones y dudas.
Como todo lo que hacemos, detrás de todo esto existe una fuerte labor de organización y pre-producción previa. Tanto Sara como yo misma, llevamos mucho tiempo preparando, estudiando y meditando cómo desarrollarlos, tratando de generar alrededor de estos encuentros un espíritu de unión y de equipo, en definitiva, tratando de conseguir crear una comunidad sólida y valiosa en la que crezcamos todos juntos. Creo que ese es el principal objetivo. Esperamos poder cumplirlo de aquí en adelante.
Las primeras veces siempre son especiales, siempre quedan guardadas en un rincón de nuestra memoria, y quizás por todo ello, son inolvidables. Hoy os mostramos el desayuno inaugural del pasado 25 de Noviembre, en el que decidimos que debía ser nuestra propia historia la que como contenido abriera esta primera jornada. Queríamos ayudar, inspirar, impulsar con nuestra humilde experiencia, a todas esas personas que un día estuvieron donde nosotras, perdidas, sin saber encontrar por dónde o cómo empezar. También por todo esto, nacieron estos encuentros, para poder compartir lo que nos une a todos en este sector, el deseo de alcanzar un sueño, vencer miedos y conseguir nuestros objetivos.
Por eso, muchísimas gracias a todos los que nos escribisteis, a todos los que solicitasteis vuestra plaza, a los que lamentablemente se quedaron fuera por el aforo y sobre todo gracias a nuestros asistentes: Conchi (Nicté Tocados), Pilar y Sara (Bohemian Love), Raquel (Magic Mirror Events), Sonia (Y bajarte la luna), Irene (Irene Zaera Joyas), Lorena (Dulzonería), Susana (Susana Mateos Foto), Guadalupe (Guadalupe Fontaneda), Marga (The Cake Project), Blanca (Le Blanc WD), Marta (Marta Frutos), Paz (Paz Guillén Atelier), Larissa (Cakery Rocks) y Cristina (Algo nuevo, prestado y azul).
Ham on Market fue el lugar elegido a conciencia, con esencia de pan recién horneado, ambiente hogareño y una decoración acogedora que nos hizo sentir como en casa. OAHUP, se unieron a este proyecto para grabar cada instante y así poder recordar este primer Desayuno Abierto LalaBlu. Detrás del objetivo, Reichel War, quien ha sabido captar esa calidez de una mañana de sábado, con café caliente y vidas cruzadas. Gracias también a Hermanas Bolena por los detallitos que prepararon con tanto cariño para nuestras invitadas.
Ya queda menos para nuestro siguiente #desayunolalablu, que lleva por título «Enamora con tus Redes Sociales» (más info aquí). Estamos a punto de agotar las plazas, así que no te quedes sin la tuya.
¡Nos vemos el 13 de Enero!
Texto: Nuria Fernández.
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