Hoy tengo que dar la crónica de una de nuestras bodas, y la verdad, es que tengo tantas cosas que decir que no se muy bien por donde empezar. Siempre cada pareja deja su huella, su pequeño hueco dentro de nosotros para siempre, y ese espacio es irremplazable, por muchas bodas que tengamos, nunca olvidamos cada detalle, cada momento que tanto trabajo nos ocasiona.
Esta boda es especial para mí por muchos motivos, uno de ellos es el tiempo, llevamos junto a esta pareja más de 3 años en los que hemos reído juntos, nos hemos entristecido y hemos compartido muchos momentos donde han convivido miles de emociones. Otro, es la responsabilidad, siempre hemos sido LalaBlu al completo, y este 11 de junio de 2016 por motivos de avanzada gestación mi otra mitad, solo pudo venir para dar un beso a la novia y desearle la mayor felicidad del mundo. El último, ha sido porque esta boda ha sido todo un reto que conseguimos completar con un nivel de satisfacción de los novios y de los invitados de un 200 %. Gracias, es mi primer agradecimiento a todos aquellos que emplearon algún minuto en acercarse a nuestro equipo para felicitarnos por todo el trabajo que hicimos respecto a la organización, el diseño y la decoración de diferentes elementos.