Una boda está formada por diferentes elementos que, en su conjunto, crean ambientes diversos. Esto lo conseguimos a través de las flores, de las sillas, del mobiliario o de la mantelería, así se pueden llegar a crear rincones llenos de personalidad y donde poder reflejar nuestro estilo o nuestros gustos.
Hoy nos detenemos en un rincón, un ambiente creado para que tus invitados disfruten de un momento tranquilo, donde poder relajarse o conversar: un espacio chill out en clave de boda.
Una de las propuestas que más nos gustan es la opción de recurrir a mobiliario como sofás Chester, sillas de aires retro o vintage, butacas y butacones, con diferentes tapicerías, a ser posible, que sugieran un ambiente cómodo y hogareño.
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No hay excusas, ya sea de día o de noche, podemos crear un espacio totalmente a nuestro gusto. Para reforzar este tipo de montajes podemos utilizar jaimas, carpas… las posibilidades son casi infinitas.
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En función del propio estilo de la boda, ya sea rústica, boho, industrial… es esta otro de los factores que deberemos tener en cuenta para crear nuestro espacio chill out.
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En resumidas cuentas, tengas el tipo de boda que tengas, un espacio chill out es un acierto. Ya hemos visto que se pueden crear dichos espacios siguiendo el estilo decorativo que queráis, pero al final, lo importante es la elección correcta de todos los elementos, para que unidos, creen esos rincones donde vuestros invitados pasen un rato relajado disfrutando de un buen gin tonic.
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Y vosotros que opináis, ¿pondríais un rincón chill out en vuestra boda?