Texto: Nuria Fernández. Fotografías: Patricia Murcia y Carlos Castillo
Hace poco alguien me decía que veía nuestra profesión un poco como una esponja, siempre adquiriendo nuevos conocimientos, siempre conociendo las tendencias, siempre estando al tanto de todo y sin que se nos escape nada. Ante tales exigencias, yo muchas veces me he preguntado eso de «¿somos wedding planners o superheroes?». Si a todo lo que se supone que una wedding planner debe controlar le sumamos el mundo redes sociales y blogosfera, la tarea por momentos se convierte en agotadora.
Los conocimientos se van adquiriendo poco a poco, se lee mucho (en inglés, muchas veces), se ve mucho y sobre todo se escucha mucho. Lo que uno ve de una forma otro lo ve de la opuesta y no hay mayor enriquecimiento que ese. Mucho del know-how de LalaBlu ha sido el resultado de brainstormings improvisados entre canapé y canapé en algún evento.
